sábado, 20 de agosto de 2011



Y ahora cantada por sordomudos. Me ha emocionado hasta el llanto.




Imagine


Imagine there's no heaven
It's easy if you try
No hell below us
Above us only sky
Imagine all the people
Living for today...
Imagine there's no countries
It isn't hard to do
Nothing to kill or die for
And no religion too
Imagine all the people
Living life in peace...
You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will be as one
Imagine no possessions
I wonder if you can
No need for greed or hunger
A brotherhood of man
Imagine all the people
Sharing all the world...
You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will live as one

Imagínate


Imagina que no existe el Cielo
es fácil si lo intentas
sin el Infierno debajo nuestro
arriba nuestro, solo el cielo
Imagina a toda la gente
viviendo el hoy...
Imagina que no hay países
no es difícil de hacer
nadie por quien matar o morir
ni tampoco religión
imagina a toda la gente
viviendo la vida en paz...
Puedes decir que soy un soñador
pero no soy el único
espero que algún día te unas a nosotros
y el mundo vivirá como uno
Imagina que no hay posesiones
quisiera saber si puedes
sin necesidad de gula o hambre
una hermandad de hombres
imagínate a toda la gente
compartiendo el mundo

Puedes decir que soy un soñador
pero no soy el único
espero que algún día te unas a nosotros
y el mundo vivirá como uno







miércoles, 17 de agosto de 2011

LA TEORÍA DE LA CONSPIRACIÓN





Se trata de la elaboración de una serie de argumentos, mediante los cuales se intenta explicar la causa del estado de cosas de un periodo determinado, de un hecho aislado muy relevante, o del triunfo de determinada facción política. Para ello, los ‘conspiradores’ aducen una serie de argumentos de elaboración propia y de muy difícil demostración, con los que intentan culpabilizar a ‘alguien’ o a ‘algo’ como muñidores de la situación, del hecho o del triunfo. Pero tampoco saben decir, a ciencia cierta, quién o quiénes son los culpables de la conspiración. Aunque siempre dicen que ‘lo tienen muy claro’.

Con el alunizaje del Apolo XI y el hecho de pisar la superficie lunar dos de sus cuatro tripulantes, se desató la teoría de la conspiración, que imaginaba que todo el montaje había sido un truco cinematográfico, para mostrar al mundo el triunfo de los EEUU en la carrera espacial.

A partir de ese momento de la historia, quizá por las condiciones favorables de tipo político y de corrupción, que favorecen la tendencia, la teoría de la conspiración está presente en todos los círculos sociales, políticos, económicos e incluso deportivos.

Todo parte de un desconocimiento total de la verdad. Queremos entonces compensar la: ‘Ni puta idea’, con un: ‘De esto tienen la culpa los masones, que me lo ha dicho a mí una persona muy enterada…’ El caso es que vivimos eternamente conspirando. Porque conspiramos por todo. Cada misterio desarrolla inmediatamente una teoría de la conspiración. Y nacen conspiradores para la existencia de Dios; para su no existencia; para el desastre económico; para la prosperidad y para la moda. Sólo, por tanto, se conspira sobre lo que no se sabe, porque, de otra manera, no habría motivo para conspirar. Todo está claro, luego huelga la conspiración.

Me juzgo como un conspirador nato, pero mis elucubraciones me parece a mí que van bien dirigidas. Como el negocio fabuloso que supuso el asunto de las vacunas de la gripe ‘A’ para todos los miembros de gobierno y para sus adláteres. Que me complace pensar que hubo comisiones multimillonarias de las que chuparon hasta el PP. Y si no chuparon unos y otros; si se limitaron a meter la pata sin llevarse ni un euro, entonces son gilipollas. De una manera o de otra: Tontos del culo o sinvergüenzas, se me cierra el círculo bastante bien, mire usted.

Sobre la medicina actual tengo varias conspiraciones, como sobre las multinacionales de la farmacia, como sobre la alimentación, como sobre la enseñanza, como sobre las entidades bancarias… De todas maneras no te hacen ni puto caso; nadie te lee, y el que lo hace te toma por iluminado de los dioses o por cachondo mental.

Mientras no tenga la completa seguridad sobre determinado aspecto que a mí me acucia, seguiré conspirando. Primero, para intentar hacer cómplices de mis elucubraciones, y segundo, para explicar lo inexplicable. No porque no tenga explicación, sino porque el verdadero meollo de la cuestión sólo lo saben los verdaderos conspiradores.





martes, 16 de agosto de 2011

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...